Apto para conducir. ¡Nacido para correr!», ha escrito el piloto holandés de Toro Rosso, que hoy cumple 18 años, en su cuenta de Twitter.
Era uno de los objetivos de Max Verstappen en 2015 y nada tenía que ver con los grandes premios.
Se trataba se sacarse el carné de conducir, algo para lo que el holandés esperaba ansioso a tener 18 años. Pues bien, hoy los celebra y la licencia ha sido uno de sus primeros regalos de cumpleaños.
Apto para conducir. ¡Nacido para correr!», ha escrito el de Toro Rosso en su cuenta de Twitter.
Verstappen luce, cómo no, a los mandos de un Renault, concretamente de uno de los modelos del fabricante de su equipo, un Clio RS.
Max ya aprobó el teórico durante el parón veraniego de la Fórmula 1, pero aguardaba al 30 de septiembre de 2015 para superar la parte práctica. «Ya he hecho el examen teórico, así que ahora tengo que esperar a que tenga los 18 para hacer el test práctico.
La ley de Bélgica, que es donde vivo, exige que tengas un mínimo de seis o siete horas de conducción. Espero que eso sea todo lo que necesite», afirmó hace unas semanas a la CNN.
Verstappen se convirtió en 2014 en el piloto más joven de la historia en ponerse a los mandos de un F-1 en la primera sesión de entrenamientos del GP de Japón: tenía 17 años y 3 días.
Con lo que no contaba Verstappen era con pasar nervios al volante durante el examen de conducir.
Debo admitir que es un alivio pasar el examen. Estaba un poco nervioso de cometer errores, pero todo salió bien», comenta el compañero de Carlos Sainz en Toro Rosso, que pese a ir «muy cómodo» en el asiento de pasajero, reconoce que el carné le permite mayor libertad: «Si quiero ir a alguna parte solo, al menos ahora puedo subirme a mi Renault Clio RS y ya está. Esa sensación de libertad es genial».
