Chloe Mafia, una antigua actriz porno, fue invitada por un piloto de la compañía Kuwait Arways junto con una compañera a permanecer en la cabina mientras viajaban con unas 300 personas a bordo a Nueva York, algo prohibido desde los atentados del 11 de septiembre. Dentro, ambos bebieron champagne y fumaron varios cigarrillos. El hombre a cargo del avión también la permitió ponerse a los mandos.
Según las declaraciones de la actriz al diario The Daily Star, el copiloto se mantuvo ajeno a lo sucedido. “El copiloto no fumó ni un cigarrillo. Hizo un par de chistes, pero estaba centrado en pilotar”, cuenta.
Por su parte, el “piloto travieso”, como se denomina él mismo, aseguró haber invitado más veces a otras chicas a cabina. Llegó incluso a solicitar a su invitada que se sentase en sus rodillas y le enseñase los pechos para ver sus implantes.
La compañía aérea Kuwait Airways no ha emitido aún ningún comunicado sobre lo ocurrido durante el vuelo y no ha respondido ante los medios de comunicación que han intentado ponerse en contacto.
