La Audiencia de Barcelona ha confirmado la condena de un año de prisión que un juez de Terrassa (Barcelona) impuso a un neonazi por proferir insultos y agredir a dos mujeres marroquíes a las que se encontró en un autobús y a quienes además intimidó con una navaja con una inscripción de las SS alemanas.
En su sentencia, la Audiencia desestima el recurso que el acusado presentó contra su condena, dictada por el Juzgado de lo penal número 1 de Terrassa, al dar credibilidad a las declaraciones de los testigos, cuyas manifestaciones son, para el tribunal, «claras, directas, sin exageraciones ni extravagancias» y dibujan un relato «coherente».