Los Mossos d’Esquadra han detenido a tres hombres de nacionalidad china de 38, 35 y 28 años como presuntos autores de cuatro robos violentos, uno de ellos en grado de tentativa. Los sospechosos se dedicaban a asaltar chóferes de camiones mientras éstos dormían o descansaban en el interior de sus vehículos para robarles dinero en efectivo después de haber descargado la mercancía y cobrado la recaudación.
La investigación se inició después de que se produjeran tres robos violentos a dos transportistas de una empresa de mercancía china con sede en la localidad de Madrid, entre agosto y octubre de 2015. Las pesquisas que hicieron los investigadores les condujo a trabajar con la hipótesis de que los autores de los robos eran tres ciudadanos de nacionalidad china.
Utilizaban armas de fuego cortas
Para llevar a cabo los asaltos elegían una zona de Badalona donde habitualmente se detienen los camioneros por la noche para descansar, una vez han descargado el género y disponen del dinero en efectivo de las entregas que han realizado durante el día. Los ladrones, que utilizaban armas de fuego cortas para intimidar a las víctimas, consiguieron llevarse alrededor de los 20.000 euros en efectivo de cada uno de los robos.
Durante la larga investigación los policías acreditaron que los autores eran los tres ciudadanos de nacionalidad china que investigaban. Los tres asaltantes residían en Madrid, localidad donde está la sede de la empresa para la que se realizaba el transporte asaltado.
Pillados ‘in fraganti’
El 26 de enero de este año, más de un año después del último asalto, uno de los dos camioneros doblemente asaltado en 2015 avisó a los Mossos que lo estaban vigilando. Le hacían seguimientos con el mismo vehículo con el que ya lo habían hecho en las ocasiones anteriores en las que la habían asaltado.
Ante esta situación los investigadores establecieron un dispositivo policial con el fin de localizar y arrestar a los ladrones. Hacia las 00.30 horas los agentes intervinieron en el momento que dos de los asaltantes se dirigían hacia el furgón del denunciante con el rostro oculto mientras esgrimían un martillo para fracturar su ventana y una pistola de fogueo. Los tres arrestados habían venido desde Madrid para cometer el robo.
