La disposición de aprender, el compromiso, la capacidad de innovar, la responsabilidad y el respeto al entorno laboral son algunas de las cualidades que nunca se descartarán para reclutar nuevos empleados
Sin embargo, la habilidad más necesaria con la que deben contar los trabajadores es la capacidad de resolver problemas eficientemente. Así que tu creatividad e inteligencia son las que te asegurarán un puesto.
Luego de culminar la universidad te darás cuenta que un título por sí solo no te conseguirá empleo y que además nadie te preparó para hacer un currículum o acudir a una entrevista. Pero esos son asuntos que tendrás que resolver por tu cuenta, capacitándote y ganando experiencia.
Ahora bien, te dejamos algunos consejos para que el proceso de buscar trabajono te resulte tan tedioso y difícil de llevar. Y recuerda: allá afuera hay un empleo ideal para ti, solo tienes que ir detrás de él.
No te compares con tus compañeros. ¿A tu amiga le ofrecieron un sueldo envidiable en la empresa más recocida del sector? No importa. Concéntrate en ti y deja de estar pendiente de la vida de los demás.
Postúlate a las vacantes adecuadas. No pierdas tiempo aplicando por empleos para los que no estás calificada aún. Tu principal objetivo es adquirir experiencia que te permita ir tras un mejor puesto más adelante.
Ten expectativas realistas de tu primer empleo. Como joven recién graduada puedes aspirar a mucho. Pero recuerda que se empieza desde abajo: puede que tu trabajo esté muy alejado de lo que imaginaste.
Tu primer empleo importa y mucho. Si es tu primera experiencia esfuérzate por que se relacione con tu carrera y enfócate en aprender para obtener un mejor trabajo luego y tener un desempeño extraordinario ahora.
