Agradecido y feliz. Así se mostrós Luis Enrique en la rueda de prensa después de ser premiado como el mejor entrenador del mundo en 2015.
El técnico asturiano se excusó de su ausencia en la gala del Balón de Oro porque “lamentablemente” no pudo asistir al evento. “Estoy muy contento. Es el trabajo recompensado de todos mis jugadores, del club y de mi cuerpo técnico. Agradezco a los que me votaron, pero lamentablemente no pude acudir”.
El Balón de Oro acaparó la mayor parte de las preguntas, sin olvidar el partido de Copa que el Barça tiene este miércoles frente al Espanyol.
El asturiano reconoció sentir “una alegría muy grande” por el quinto galardón de Messi que lo acredita como mejor jugador del mundo. “Todos sabíamos que iba a ser el ganador por su temporada. Es un claro reconocimiento al mejor jugador de todos los tiempos”, sentenció.
También tuvo palabras para Neymar, a quien cree que cada vez será más habitual verle luchar por este tipo de trofeos individuales. “Ney cada vez está más presente en estos premios; es más reconocido a nivel mundial”. En referencia al brasileño y al argentino, afirmó que “les quedan muchos Balones de Oro por ganar”.
Sin embargo, Luis Enrique lamentó la ausencia de algunos de sus jugadores en el podio de Zurich, así como en el mejor once inicial del año. “Tengo jugadores que también merecían estar allí después de un año increíble. Echo en falta a muchos de mi equipo”, admitió el asturiano.
Preguntado por el partido de vuelta que disputarán en Cornellà-El Prat, cree que la tensión que existe después de los dos derbis de la semana pasada no afectará al juego del equipo.
No pasó nada que no haya pasado en infinidad de ocasiones cuando yo jugaba. Todos han jugado este tipo de encuentros, aunque es importante poner un poco de prudencia y de tranquilidad”, agregó.
