Por Ramón Carreño.
En la República Dominicana el escenario político ha dado un giro extraordinario debido principalmente a la gestión de gobierno del actual presidente Danilo Medina, en segundo lugar a la división del PRD que ha parido al PRM y en tercer lugar a la ola de partidos pequeños que buscan alianza con los grandes partidos para asegurar su permanencia y su participación en el gobierno.
Veamos: La forma de gobierno del actual presidente, su sencillez, su revolución educativa, su apoyo decido a los agricultores con sus visitas sorpresas, los financiamientos a las pequeñas y medianas empresas, los créditos a los pobres sin garantías mediante la banca solidaria y otras medidas de carácter social, trajo como consecuencia el apoyo de los aspirantes a la presidencia del PLD a la reelección presidencial y también los vientos fueron apagados, todas las mediciones que se han realizados dan como resultado un elevado apoyo al actual presidente para su reelección.
La división interna del principal partido de la oposición hizo posible reformar la constitución sin mayores problemas a pesar de la oposición interna de la facción de Leonel que empujaban y soplaban los vientos. Pero también esa división provocó el nacimiento del PRM que se perfila como la principal fuerza opositora, lo cual cambia totalmente el escenario político yel PRD se convierte en aliado con una cuota de poder, ósea de principal fuerza opositora a aliado del gobierno.
Del partido reformista lo único que se puede decir es que continúa su derrotero hacia la división con la salida de su partido de Amable Aristy para formar su propio proyecto político.
Las demás organizaciones políticas que no formen alianza con Danilo Medina solo le queda un camino una alianza con la oposición o prepararse para que una vez termine el proceso electoral del 15 de mayo de 2016 fajarse a buscar firma para su reconocimiento porque los votos se dividirán entre Danilo y Luis Abinader, esa es la realidad del escenario político Dominicano.
