Según el diario Mirror, una adolescente, Ashley Miller, ha admitido ante las autoridades que se tomó varios “selfies” mientras tenía relaciones sexuales con su perro en casa de su abuela.
La jovencita confesó que ha tenido sexo con su perro pit bull, llamado 2-caras, entre 30 y 40 veces por los últimos cinco años. Pero también aceptó haber hecho lo mismo con su anterior perro, llamado Cara Cortada, quien le realizaba sexo oral.