El exfutbolista portugués Luis Figo retiró este viernes su candidatura a la presidencia de la FIFA, que se decidirá en las elecciones del día 29, por “una grave falta de transparencia democrática”. Lo hizo horas después de que otro de los candidatos, el holandés Michael van Praag, que dirige la federación de su país, también se apartara de la carrera electoral. El príncipe jordano Ali Bin Al Hussein, que recibió el apoyo público del holandés, queda como único rival de Joseph Blatter, en el cargo desde 1998. Si finalmente concurre a las elecciones, serían las primeras con oposición desde las celebradas en Seúl en 2002, antes del Mundial de Corea y Japón.
El exjugador del Barça y el Real Madrid, entre otros, que proponía en su programa un Mundial con 16 selecciones más, ha dado un portazo con duras críticas a las elecciones] y al máximo organismo del fútbol mundial. “Este proceso es un plebiscito de entrega del poder absoluto a un solo hombre — algo que me niego a aguantar—”, expresó el portugués en un comunicado.
Al-Hussein, candidato a la presidencia de la FIFA. / Matt Dunham (AP)
“Viajé y conocí a gente extraordinaria, que reconociendo el valor de muchas de las cosas que se hicieron, también se identifica con esta necesidad de cambio, que limpie a la FIFA del sello de organización oscura y tantas veces vista como un espacio proclive a la corrupción”, constató. “El proceso electoral es todo menos una elección”, criticó.
Luis Figo denunció además que a los aspirantes no les permitieron dirigirse a las federaciones durante los congresos, “mientras uno de los candidatos hablaba siempre él solo desde lo alto de una tribuna”. Y añadió: “No existió un único debate público sobre los programas de cada uno”.
