El Parlamento de Malta aprueba la Ley de la Declaración de Orientación Sexual, Identidad de Género y Expresión de Género, considerando «engañosa y perjudicial» cualquier acción de «curar» a una persona homosexual, bisexual o transexual.
De esta manera se convierte en el primer país europeo que prohibe legalmente las denominadas terapias de conversión. En la misma sesión, celebrada el martes, 6 de diciembre, también se aprueban enmiendas a las Actas de Identidad de Género, Expresión de Género y Características Sexuales, permitiendo la entrada de personas extranjeras que deseen hacer su transición de género, así como reducir la edad para solicitar el cambio de sexo a los 16 años de edad.
La prohibición de las terapias de conversión ha sido unánime por todos los parlamentarios, imponiendo multas entre 1000 y 5000 euros y hasta cinco meses de prisión para cualquier médico o terapeuta que trate de cambiar, reprimir o eliminar la orientación sexual de otra persona.
«Abiertamente desaprobamos las prácticas que son perjudiciales para las personas de nuestra comunidad (…). [Con esta medida] no sólo se rechaza a un grupo de individuos sobre la base de prejuicios infundados y la falta de tolerancia hacia la diversidad, sino que se produce un impacto en el reconocimiento internacional de los derechos LGBTIQ.
Como un conjunto fomentamos el respeto y la igualdad de todas las personas y estamos decididos a seguir trabajando para que nuestros clientes disfruten de la experiencia terapéutica que merecen», así se manifiestan la Malta Chamber of Psychologists, la Maltese Association of Psychiatry, la Malta Association of Family Therapy and Systemic Practice y la Malta Association for the Counselling Profession que han aplaudido la aprobación de esta ley en cuyo proceso están orgullosos de haber participado.
