La baja por lesión de Luka Modric ha trastocado los planes de Zinedine Zidane. El croata es una de las piezas imprescindibles de este Real Madrid que, a pesar de ser líder, se ha visto ensombrecido en Liga tras los empates contra Villarreal y Las Palmas y también en Champions con las tablas firmadas ante el Borussia Dortmund.
Zidane tendrá que redibujar su pizarra no sólo ante el Eibar, sino también en los próximos cuatro partidos. El croata se resintió de sus molestias en la rodilla izquierda durante el encuentro contra el Borussia. Esta dolencia le ha impedido entrenar con normalidad este viernes y finalmente el Real Madrid emitió un comunicado médico confirmando su baja.
En dicho comunicado no se especifica la duración de su ausencia, pero todo apunta a que Zidane no podrá contar con el croata durante las próximas 3 o 4 semanas. Un periodo donde el Madrid tiene que recibir al Eibar, jugar en el Benito Villamarín contra el Betis, recibir al Legia en Champions y Athletic en Liga y rematar el mes de octubre en el campo del Alavés. Casi nada.
Y todo esto tras cosechar tres empates que han ensombrecido su liderato en el campeonato doméstico. Zidane reservó a Modric ante el Villarreal en vistas al apretado calendario con Champions incluida. Precisamente contra el ‘submarino amarillo’ el conjunto blanco cosechó el primer empate de los tres consecutivos.
Y es que las estadísticas sin Modric no acompañan al Real Madrid. El conjunto de Zidane ha firmado siete derrotas y ocho empates en los 58 partidos que el croata se ha perdido desde que llegó a Madrid en verano de 2012.
