El narcotraficante mexicano, Joaquín “El Chapo” Guzmán aseguró estar siendo maltratado en el Centro Federal de Rehabilitación Social (Cefereso) número 1, ubicado en Almoloya de Juárez y conocido como “El Altiplano”.
El mexicano asegura que su salud está deteriorándose debido al trato que está recibiendo en el recinto.
“Hasta el día de hoy traigo problemas de salud por la razón de que casi no duermo porque en el día paso lista cada hora y en la noche cada cuatro horas. No entiendo por qué la actitud de quien está llevando esta práctica de estarme torturando y no dejarme dormir. Hago responsable por mi vida a quien o quienes están llevando a cabo esta práctica hacia mi persona”, expresó el líder del cartel de Sinaloa en una declaración formal que dio a conocer su abogado, José Refugio Domínguez, al equipo del periodista mexicano Ciro Gómez Leyva.
Según el líder del Cártel de Sinaloa, también le han sido restringidas las salidas a lugares abiertos, así como las visitas de familiares, su actual cónyuge y su equipo legal.
«Manifiesto que de la fecha que llegué aquí no he tomado el sol, siempre he permanecido en la estancia donde estoy, nada más salgo cuando hay notificaciones del juzgado, hasta el día de hoy no tenido visita familiar de mi familia, nada más tuve 15 minutos de mi hermana Almira y 15 minutos de visita con mi esposa Emma Coronel. Con mi defensor nada más he tenido media hora de visita y reitero, me siento mal de la salud», agregó.
Guzmán asegura que le pasan lista ante una cámara, en la que debe contar hasta cinco. Manifestó que nunca había sufrido de presión (alta), por lo que ahora le duele la cabeza. los oídos y se siento sonámbulo.
“Me dan medicamento en la mañana, a mediodía y en la noche, pero el problema no es el medicamento, el problema es que no me dejan dormir, dejándome dormir no ocupo medicamento, no me dolería la cabeza ni los oídos”, expresó en el documento.
Coronel, esposa del capo, declaró este domingo durante su entrevista con la periodista Anabel Hernández de Telemundo que está preocupada por la salud de su esposo y que las autoridades “quieren hacerle pagar por haberse fugado”.
«Están tratando de cobrarse lo de su fuga. Dicen que no lo están castigando. Por supuesto que sí. Se están todo el día con él, viéndolo en su celda todo el día, le están pasando lista cada hora. No lo dejan dormir. No tiene privacidad ni para ir al baño.”, dijo la esposa de El Chapo.
