Un gol de Rómulo en el tramo final de la primera parte de la prórroga deshizo la igualdad con Serbia y dio el triunfo a Rusia (2-3), finalista del Campeonato de Europa de fútbol sala por sexta vez, tercera consecutiva.
Rusia buscará el segundo título continental de su historia, tras el obtenido en 1999, ante el ganador del duelo entre España y Kazajistán. Lo hará sin su goleador Eder Lima, expulsado por doble amonestación en la segunda mitad.
El conjunto de Sergei Skorovich sufrió hasta el final. Necesitó el tiempo extra para deshacerse del conjunto anfitrión, por primera vez en unas semifinales, que rentabilizó con su entusiasmo y calidad el factor ambiental.
El choque estuvo lleno de intensidad y equilibrio hasta el final. Serbia respondió a cada mazazo dado por Rusia. El primero fue en el minuto 13, cuando un robo de Daniil Davydoff en el centro del campo llevó la pelota a Eder Lima que, tras sortear al meta y casi sin ángulo, materializó su cuarto tanto en la fase final para adelantar a los subcampeones.
Serbia reaccionó. Ya había avisado en varias ocasiones. El meta Gustavo sostuvo al conjunto ruso. Sin embargo, nada pudo hacer en el disparo lejano de Mladen Kocic en el minuto 26. Aprovechó la dinámica el cuadro balcánico. Se creció. El propio Kocic pudo adelantar a los locales, pero el portero ruso respondió con acierto en cada ocasión.
Rusia volvió a adelantarse a falta de siete minutos y medio. Sergei Abramov recibió un balón de Sergei Sergeev. Marcado por Kocic al borde del área ejecutó un ‘sombrero’ sobre su defensor para, con la pierna izquierda, sorprender al portero Miodrag Aksentijevic.
