Sugun estudios realizados, dan mejores salarios a mujeres y jóvenes en RD

Los años de estudio de la mujer son mejor recompensados que los de los hombres, mientras que la población joven (18-29 años) obtiene mayor beneficio de la educación en comparación con la población de mayor edad (30-65 años).

El dato forma parte de los hallazgos de la investigación “República Dominicana: Tasa de retorno de la Educación 2000-2014” realizada por los investigadores Boanerges Domínguez, Carmen García y Evalina Gómez.

En promedio, un individuo que posee educación a nivel básico, secundario o universitario genera ingresos superiores a los ingresos de un individuo sin educación formal en el orden de 2.7%, 14.2% y 40.7%, respectivamente, controlando por variables demográficas.

Los resultados del estudio se presentaron en el VI Congreso Internacional de Investigación Educativa organizado por el Instituto Dominicano para la Evaluación e Investigación de la Calidad Educativa (IDEICE).

Los investigadores aplicaron técnicas econométricas a los resultados de la Encuesta Nacional de Fuerza de Trabajo (ENFT) para el período 2000-2014 con la finalidad de analizar el comportamiento de las tasas de retorno a la educación en la población dominicana.

Por ejemplo, uno de los hallazgos es que la población joven (18-29 años) obtiene mayor beneficio de la educación en comparación con la población de mayor edad (30-65 años). Formar parte del mercado laboral y tener entre 18 y 29 años implica una tasa de retorno igual a 7.9%, mientras que pertenecer al segundo rango de edad la tasa de retorno es igual a 7.2%. Similarmente, los años de estudio de la mujer son mejor recompensados que los años de estudio de los hombres.

Esto no cambia el hecho de que los hombres reciben en promedio mejores salarios que las mujeres. Específicamente, para el 2014 las mujeres presentaban una tasa de retorno de 7.1% versus 6.1% de los hombres.

El residir en una zona urbana y tener un empleo en el sector formal también incide en la obtención de mayores salarios según el nivel educativo, en comparación con aquellos residentes en una zona rural o que laboran en el sector informal.

 




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