En ocasiones damos con noticias bastante sorprendentes y no salimos de nuestro asombro ante la idea de pensar en cómo reaccionan los protagonistas que dan vida a las mismas.
Para la que tenemos ahora delante de nosotros, nos trasladamos hasta la ciudad de Filadelfia dónde un hombre transgénero descubrió que estaba embarazado cuando llevaba ya 21 semanas de gestación y pensó que lo que le ocurría no eran más que gases o que estaba engordando de una forma desmesurada.
Kayden Coleman es el protagonista de nuestra historia y confirma que esto le pasó cuando ya llevaba diez años admitido como hombre y viviendo una vida plena como tal.
El proceso hormonal al que se sometió este joven comenzaría hace cinco años y él quedó embarazado de su hija Azaelia que nació ahora hace casi un año. Todo esto pasó por una interrupción que tuvo en su medicación ante una irregularidad.
El joven Kayden y su marido no lo podían creer pero la realidad era muy diferente, ya que estaban ante situación insólita pero que igualmente, les hacía muy felices y estaban dispuestos a todo para la felicidad de su pequeña. Ambos han tomado la decisión de hablar con su hija cuando ésta tenga al menos cinco años.
Por otro lado, la pareja ha insistido en que ambos se sienten muy contentos y satisfechos de su decisión y aseguran que a la pequeña Azaelia no le faltará absolutamente nada porque tiene unos padres que la quieren y sobre todo, la respetan. ¡Deseamos los mejores deseos para la familia!
