Después de jugar su último partido ante más de 70 mil aficionados, Xavi Hernández hizo su debut en la liga de Qatar este domingo, con victoria de su equipo Al Sadd por 4 a 0, delante de dos mil 253 hinchas.
Para un jugador que ha ganado 28 trofeos, incluyendo la Copa del Mundo, dos Eurocopas y que tuvo como última actuación con el FC Barcelona la victoria en la final de la Liga de Campeones ante la Juventus en junio, una noche de sudor en Doha no será recordada como uno de los grandes momentos de su carrera.
Sin embargo, para el equipo de Xavi, el Al Sadd, la noche fue el inicio soñado de campeonato al vencer fuera de casa por 4-0 al Mesaimeer, recién ascendido.
Después, Xavi no quiso hablar sobre sí mismo y respondió siempre fijándose en el colectivo, como hizo durante toda su carrera.
«Fue positivo ganar», dijo Xavi. «Tuvimos muchas ocasiones, tenemos un buen equipo y jugamos un buen futbol», afirmó.
Además agregó que tiene la ocasión de aumentar su ya extenso palmarés con su nuevo equipo, que luchará por la liga tras acabar segundo la temporada pasada.
Pese a los tres puntos y a su intento de mantenerse al margen, el partido solo tuvo un aliciente, incluso para sus compañeros: Xavi.
«Xavi es una superestrella y un líder experimentado. Se ha adaptado rápidamente al equipo y esperamos mucho de él, especialmente por su experiencia, lo que tendrá un gran efecto en el equipo», comentó el defensa Abdulkarim Hassan sobre su nuevo compañero.
El fichaje más caro y mediático de la Liga qatarí atrajo a aficionados al futbol dentro de los expatriados en Qatar, procedentes de lugares tan diversos como Burkina Faso, Uganda, Irán, Kenia, Etiopía o Nepal, además de a hinchas locales.
«Es la primera vez que vengo a ver un partido aquí, pero vine por Xavi. Soy seguidor del Barcelona», dijo a la AFP Sadat, de 29 años, que trabaja como guardia de seguridad. «Es la primera vez que le veo jugar».
Sentado junto a un grupo de aficionados ruidosos -unos cantando, otro golpeando tambores, otros comiendo semillas de girasol en el estadio Al-Araby- estaba Arrisala, un keniano de 23 años nativo de Mombasa.
«Estoy muy feliz de estar aquí, es muy emocionante», dijo. «Queremos ver a todos los buenos jugadores en Qatar», añadió.
