Rosi le ha puesto las cosas muy complicada a Pelayo Díaz en su cambio. Se ha quejado todo el rato y no le ha dejado trabajar a gusto, probablemente, porque le daba mucho miedo a verse completamente cambiada y diferente. El estilista lo tenía claro, lo primero que ha hecho ha sido quitarle las extensiones, las mallas y las manoletinas de ‘choni’ para convertirla en una chica más adulta y segura de sí misma.
«Me gustan los cardados, el leopardo y el rosa», así ha entrado pidiendo un cambio de imagen a los coaches. Y nada más verla han entendido por qué dice eso, vestida con un vestido rosa ajustadísimo, con extensiones rubias, llena de tatuajes… Rosi ha intentado convencerles y sólo pelayo Díaz ha aceptado este reto.
El estilista ha ido a su casa para conocer un poco más sus gustos y se ha encontrado con una gran sorpresa: la ropa que tiene está un poco desfasada. Además Rosi le ha enseñado cómo vestía hace unos años y se ha dado cuenta que tiene un estilo ‘choni’ muy marcado.
