El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), la principal organización defensora de los derechos humanos de la diversidad sexual de Chile, ha denunciado públicamente la paliza homófoba sufrida por una mujer de 38 años en el país latinoamericano por parte de un grupo de jóvenes neonazis.
Sandra Ramírez, una mujer chilena de 38 años, ha denunciado ante la policía y ante los medios de comunicación la paliza con insultos homófobos que recibió en la Avenida San José por parte de un grupo de jóvenes neonazis compuesto por dos hombres y una mujer. Ramírez ha aportado un parte médico que avala las lesiones sufridas en la denuncia policial que ha presentado con el objeto de que las autoridades encuentren a los jóvenes responsables de la brutal agresión.
Ramírez fue agredida por el grupo de jóvenes neonazis cuando se encontraba de camino hacia su lugar de trabajo, consiguiendo huir en medio de la agresión y, tras recibir el apoyo de su pareja, acudiendo a la comisaría de San Bernardo para demandar los hechos acontecidos.
Ramírez ha indicado que fue objeto de numerosos insultos homófobos durante la brutal agresión, motivo por el que no duda en ningún momento de que se trata de un crimen de odio basado en su orientación sexual. Entre otras cosas, la llamaron «lesbiana asquerosa», «escoria» o «maricona».
