El seleccionado nacional cayó en 11 entradas frente a República Dominicana 10-3. Espera el partido entra Estados Unidos y Canadá para saber si continúa con vida en este torneo.
Colombia ha dejado alma y corazón en este Clásico Mundial de Béisbol. No se achicó ante ningún rival, a pesar de las limitaciones ofensivas con las que contó. Todo lo dejó en manos de los lanzadores y ellos respondieron.
Sucedióen el primer partido con José Quintana y en el segundo con Julio Teherán. Este domingo Felipe Urueta, manager del combinado nacional, eligió a Nabil Crismatt, joven de la organización de los Mets.
Recibiótres carreras, dos de ellas limpias en tres entradas, pero salió dejando vivo al cuadro tricolor, que aunque empató el juego 3-3, en la decimoprimera sufrió con los bates dominicanos que anotaron cinco carreras para salir por la puerta grande y ganar 8-3.
República Dominicana inició aprovechando la inexperiencia del lanzador barranquillero. Jean Segura le conectó un imparable al jardín derecho, con dos strikes en su cuenta, y después se robó tercera base, para anotar por elevado de sacrificio de José Bautista. Parecía que el equipo caribeño iba a seguir de largo, pero Crismatt apretó y sacó la entrada. Fueron 22 lanzamientos, un tercio de los 65 que tienen permitido los lanzadores en esta primera ronda.