John Hanke, el licenciado en Humanidades al que Google apadrinó con 35 millones de dólares antes de crear Pokémon Go

John Hanke se ha hecho mundialmente famoso desde hace sólo dos meses por ser el desarrollador de Pokémon Go. Como suele suceder, la foto finish de los triunfadores eclipsa a los insípidos inicios, a los vaivenes y a los lejanos fracasos.

Hoy parece que Hanke es un hombre genial surgido de la nada, millonario y rey Midas de los videojuegos de última generación con un talento que más parece suerte. Pero lo cierto es que este emprendedor a punto de cumplir los 50 años ha dedicado la mitad de su vida a innovar, buscar e investigar nuevas formas de entretenimento con el objetivo de cambiar el mundo que nos rodea.

Estas han sido las claves del éxito de alguien cuya manera de entender el mundo recuerda a Steve Jobs por lo tecnológico y a Walt Disney por la creación de completos universos animados de fantasía.

El rechazo a las gafas de realidad virtual

Steve Jobs dijo en su célebre discurso a los alumnos de Stanford en 2005 que todo en nuestra vida parece aleatorio si miramos hacia adelante, pero de pronto todo nuestro presente cobra sentido “cuando conectamos los puntos hacia atrás”. El caso de Hanke es exactamente así.

Su historia comienza con su graduación en Humanidades por la Universidad de Austin (Texas) en 1989 y con un trabajo en el Departamento de Estado del gobierno estadounidense del que poco ha trascendido. Después cursó un MBA en la Escuela de Negocios Haas de la Universidad de California que terminó en 1996, momento en el que ayudó a crear dos empresas de software informático: Archetype Interactive y Big Red.

Seducido por la tecnología, ya entonces se rebeló ante la idea de que la realidad virtual debía limitarse a ponerse unas aparatosas gafas en una habitación oscura y tener experiencias estáticas lo que, por entonces, era lo último y más futurista. Así se plasmó en infinidad de películas y canciones, como en el videoclip de Aerosmith para su ‘Amazing’ de 1993.

En aquellos años Hanke ya buscaba otras salidas, como “una realidad aumentada para la que no se necesitaran gafas especiales”, dijo recientemente en una entrevista en el Financial Times. No pocos han visto esa frase como un capón a Mark Zuckerberg y sus Oculus Rift ¿Para qué crear mundos paralelos, si puede crearse uno más útil y avanzado?

Consiguió su primer gran éxito profesional colaborando en la creación de un videojuego de rol online llamado Meridian 59 (M59), considerado como el primero que utilizó gráficos en 3D. Salió a la venta en septiembre de 1996 comercializado por la compañía 3DO Company, cuyo lema era ‘We’re here to play’ (‘Estamos aquí para jugar’) y extinta desde 2003.




Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

WordPress Lightbox Plugin
Ir a la barra de herramientas