Maduro actuará judicialmente contra España por incitar al odio

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha anunciado que actuará judicialmente contra España por incitar al «odio» con el fin de «justificar cualquier cosa»: una «invasión, o un magnicidio contra mi.

En una comparecencia en televisión, el mandatario venezolano aseguró que citó al embajador de Venezuela en Madrid y está preparando un grupo de juristas españoles, europeos y venezolanos con el fin de solicitar el amparo a favor del derecho a la paz en Venezuela y al derecho a la verdad del pueblo español «porque a los medios de comunicación de la derecha española se le fueron los tapones».

El que quiera venir a Venezuela y conocer la verdad es libre de caminar donde quiera y de hablar con quien quiera» y conseguirá «una

y otra opinión», dijo Maduro. Pero recalcó que en esencia, Venezuela es «un país libre, democrático, en paz, construyendo su destino» y vaticinó que «los problemas que tenemos hoy los superaremos». «Si ustedes ven la prensa en España, por ejemplo, verán una propaganda de guerra», aseguró Maduro, quien dijo que él no niega las dificultades por las que atraviesa Venezuela y por eso dictó un decreto de emergencia económica, pero insistió en que «ese país de desastre que presentan en España es para tapar la miseria, el hambre y la tragedia social que hay en España», donde «es espantosa la campaña de guerra».

Maduro dijo que por ello va a llevar a cabo una serie de actuaciones jurídicas en España y en Europa «para que se respete el honor de Venezuela y cese esta campaña de guerra psicológica donde están inyectando odio y justificando cualquier acción violenta y de guerra contra su país», indicó.

Mientras Maduro arremete contra España, la oposición sigue pendiente de la petición de un referéndum revocatorio contra el jefe de Estado venezolano. Al respecto, el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Henry Ramos Allup, ha anunciado que una comisión de siete diputados, presidida por el diputado Enrique Márquez, acudirá este miércoles a la sede del Consejo Nacional Electoral (CNE) para consignar un documento en el que se emplaza a la institución a publicar el cronograma de dicho referendum.

Y es que, según Allup, el CNE está posponiendo el revocatorio «y va a asirse a una sentencia de la Sala Constitucional para alejar el referéndum tanto como pueda».

Seguiremos agotando todas las vías democráticas para lograr el referendo este año», destacó Ramos Allup, quien dejó claro que la lucha pacífica en la calle no cesará, ya que es un derecho constitucional. La Mesa de Unidad Demcrática (MUD) ha puesto en marcha una ‘hoja de ruta’ para expulsar a Maduro del Palacio de Miraflores antes de que expire oficialmente su mandato, en 2019, que incluye un referéndum para que los venezolanos decidan sobre su continuidad en el cargo.

La oposición ha entregado casi dos millones de firmas –frente a las 200.000 necesarias– para activar la consulta popular y ha protagonizado marchas multitudinarias para exigir al CNE que cumpla estrictamente los plazos. El motivo de la urgencia es que, si el referéndum revocatorio no se convoca antes del 10 de enero, aunque los venezolanos decidan la salida de Maduro, no habrá elecciones inmediatas porque el vicepresidente, Aristóbulo Istúriz, asumirá el cargo de forma interina hasta 2019.

Por su parte, el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ha asegurado que el mandatario venezolano, «busca un enemigo exterior». «Antes le daba estacazos a Obama y ahora a un hombre más modesto, como yo», ha manifestado.

Así se ha pronunciado en un entrevista en el Canal Extremadura Televisión, recogida por Europa Press, al ser preguntado por los ataques del presidente venezolano, quien incluso le ha retado a debatir con él. «Hay cosas que hay que tomárselas con espíritu deportivo», ha apostillado.

Rajoy ha afirmado que le «da mucha pena lo que está ocurriendo en Venezuela» y ha agregado que le gustaría que aquel país «funcionara como una democracia». En este sentido, ha tachado de «vergüenza» que el opositor Leopoldo López «esté en la cárcel», ya que «no ha hecho absolutamente nada». El jefe del Ejecutivo ha insistido en que en Venezuela «la situación económica es terrible» y ha dicho que Maduro «busca un enemigo exterior», si bien eso «no va a resolver los problemas» del país.




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