Haití enfrenta su séptima crisis política institucional de los últimos 30 años con gobiernos derrocados por golpes de Estado, confrontaciones armadas, expulsiones de mandatarios, exilios y vacios de poder, como el ocurrido el domingo 7 de febrero, cuando el presidente Michel Martelly entregó el gobierno sin la nación haber elegido un sucesor, al fracasar la celebración de la segunda vuelta electoral, que estaba pautada para el 24 de enero de 2016.
Gran parte de estas confrontaciones repercuten en República Dominicana, país que casi siempre ha acogido los exiliados hatianos, en cumplimiento con la Convención de Ginebra de 1951, como ocurrió en 1986, cuando una insurrección militar encabezada por el general Henri Namphy derrocó al dictador Jean Claude Duvalier (Baby Doc), quien había heredado la presidencia de su padre Francois Duvalier ( Papá Doc) en 1971.
Pero, en meses de inestabilidad política, la última crisis institucional inició el domingo, luego que el presidente Michel Martelly entregó la banda presidencial al presidente de la Asamblea Nacional, Jocelerme Privert, y se marchó a su casa, dando lugar a un vacio de poder, ante la imposibilidad del Consejo Nacional Electoral Provisional no pudo organizar la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, debido a la crisis política desatada tras la celebración el 25 de octubre de 2015 de la primera vuelta electoral para elegir al sustituto del mandatario, por las protestas callejeras y el boicot al proceso comicial por el candidato opositor Jude Celestin, quien hubo irregulares y se habría cometido un fraude para favorecer al candidato Jovenel Moise, que apoyaba Martelly, a quien el CNEP declaró ganador con un 32.7% de los votos emitidos.
Durante las últimas tres décadas el único mandatario haitiano que ha completado dos mandatos presidenciales y ha logrado entregar la banda presidencial a su sucesor es René Preval, antiguo aliado del expresidente Jean Bertrand Aristide, líder del moviiento Familia Lavalás, de gran influencia en las masas pobres haitianas.
Recuento
Entre los gobiernos que han sido derrocados figuran el dictatorial que encabezó desde 1971 Jean Claude Duvalier (Baby Doc), derrocado en 1986 por una insurrección militar encabezada por el general Henri Namphy, quien envió al exilio al mandatario y se instauró como jefe del Gobierno.
En enero de 1988 ascendió a la presidencia Leslie Francois Manigat, pero siete meses después el general Namphy también le derrocó mediante un golpe militar. Sin embargo, ocho meses después el general Prósper Avril lideró otro golpe de Estado y sacó del gobierno a Namphy, a quien envió al exilio.
Ese mismo año, la ex jueza de la Suprema Corte de Justicia de Haití, Ertha Pascal Trouillot, asumió un gobierno provisional que organizó un proceso electoral, durante el cual fue elegido como presidente el exsacerdote Jean Bertrand Aristide, quien sumió la Presidencia de la República en febrero de 1991.
Fruto de la inestabilidad política en que aún permanecía ese país, ocho meses después, en septiembre de ese año, el general Raoul Cedrás, con el apoyo de los cuerpos militares comandados Louis Jodel Chamblain, lo derrocaron enviándolo al exilio, dando lugar a una de las peores crisis que ha vivido esa nación, producto de las sanciones internacionales de que ha sido objeto dese entonces, las cuales han generado un mayor éxodo de haitianos hacia República Dominicana, Miami, Cuba, Jamaica y otros países latinoamericanos en busca de mejor vida.
Sin embargo, tres con el apoyo del Gobierno de los Estados Unidos, en ese entonces presidido por Bill Clinton, en el 1994 realiza la operación “Restaurar la Democracia”, y restablece en el gobierno a Aristide y envía al general Cedrás exilado a Panamá.
Como la Constitución de Haití prohíbe la reelección, Aristide no pudo presentarse como candidato presidencial, y en 1995 su primer ministro, René Preval se presentó como candidato a la Presidencia y resultó electo con el 88% de los sufragios, resultado que le permitió ejercer su período de cinco años con mayor estabilidad política, pese a afrontar una intentona golpista.
Una vez cumplió su gestión en el 2001, Aristide volvió a presentarse como candidato y resultó ganador del proceso electoral con el 91% de los votos emitidos quien al asumir la presidencia de inmediato comenzó una campaña anti imperialista, distanciándose de Francia al exigir a ese nación europea una indemnización a la nación haitiana bajo el alegato de la esclavitud y apropiación de sus riquezas durante las décadas de dominio colonial entre los años 1825 y 1885.
Dos años después, en 2003, el exiliado Guy Philippe organizó un movimiento armado con la finalidad de derrocar a Aristide, pero después de controlar la mayor parte del país fue impedido de entrar a Puerto-Príncipe.
Mientras los insurrectos se preparaban para sacar al presidente Aristide del Palacio fuerzas internacionales llegaron Haití en horas de la noche por el aeropuerto Toussain Louverture, se trasladaron al Palacio y se llevaron a Aristide a un exilio forzoso en Sudáfrica, dando lugar a un gobierno provisional que llamó a elecciones que ganó René Preval, quien saneó la economía y restableció la estabilidad política, organizando unos comicios en los resultó ganador Michel Martelly, en medio de denuncias de un alegado fraude con el apoyo de Francia, Estados Unidos y Canadá, asumiendo el 7 de febrero del 2011.
UN APUNTE
Haiti
Haití está localizado en la parte oeste de la isla que comparte con República Dominicana, con una extensión fronteriza superior a 300 kilómetros, que económicamente se sostiene del contrabando y el comercio de productos con los dominicanos, que moviliza unos US$2 mil MM anual.
