Se le fue la mano. Y ahora también los 334.934 euros que cobró de pólizas aseguradoras por un accidente de tráfico fingido. El hombre ha sido condenado por la sección primera de la Audiencia Provincial de Castellón a cinco años de cárcel por un delito de estafa tras comprobarse que todo fue una argucia.
La sentencia considera probado que el hombre se amputó la mano en su casa, provocó un siniestro de tráfico y colocó el miembro cortado a los pies del asiento del conductor para engañar al seguro.
Ahora tendrá que ingresar en prisión y devolver el dinero cobrado. El condenado es un agricultor que atravesaba por problemas económicos.
Para paliar su situación no se le ocurrió otra cosa que contratar ocho pólizas con varias aseguradoras e intentar estafarlas.
En la madrugada del 10 de diciembre de 2007, se amputó (él mismo o un colaborador) su mano derecha con un objeto cortante.
Tras practicarse un torniquete para contener la hemorragia, condujo su coche hacia la carretera conocida como Camino Viejo de Nules a Moncófar (cerca del municipio de Onda, en Castellón) y lo dejó caer por un terraplén. Después colocó la mano amputada a los pies del asiento del conductor y prendió fuego al vehículo con una bolsa de gasolina que llevaba en el coche.
Seguidamente, llamó al 112, teléfono de emergencias, y se tumbó en el suelo. La primera persona que acudió en su ayuda fue un agente de la Policía Local de Nules, quién se encontró al agricultor tumbado, fumándose un cigarro.
