Hasta 1973, la homosexualidad se definía como una «perturbación sociopática de la personalidad», pero el psiquiatra Robert Spitzer la redefinió, determinando que no era una enfermedad.
El psiquiatra considerado como el padre de la clasificación moderna de las enfermedades mentales murió a los 83 años de edad, a consecuencia de un problema cardíaco, según informó BBC.
Spitzer reemplazó el diagnóstico por «perturbación orientación sexual», para describir a aquellas personas cuya orientación sexual fuese homosexual o heterosexual, les causara angustia, según amplía 2001.com.
Asimismo, en 2001, protagonizó una polémica al publicar un estudio que pretendía apoyar la terapia para «convertir» a los gays en heterosexuales. 10 años después Spitzer se disculparía, asegurando que esa investigación había sido lo único que lamentaba de su carrera.
