La prensa oficialista oculta varios de los contactos de la Secretaria de Comercio de EEUU en Cuba.
Penny Pritzker, secretaria de Comercio de EEUU, y la delegación que la acompañó durante su estancia en La Habana, del 6 al 8 de octubre, se reunieron con altos funcionarios del Gobierno cubano y visitaron sitios de interés económico, como la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZEDM); además del encuentro que sostuvieron con representantes del Gobierno y del sector empresarial con el fin de explorar el alcance de las medidas adoptadas por el presidente Obama en enero y que fueron ampliadas en septiembre.
Sin embargo, el periódico Granma, los días 7 y 8 de octubre, dio una información bastante resumida y manipulada del amplio programa que cumplió Pritzker. Las dos actividades más importantes que sostuvo la Secretaria de Comercio con sus partners cubanos no fueron reflejadas por los medios oficiales.
El 9 de octubre los diarios Granma y Juventud Rebelde se refirieron al panel dedicado al reclamo sobre el levantamiento del embargo, celebrado el 8 de octubre en el Ministerio de Relaciones Exteriores, el cual fue trasmitido por YouTube. Como se comprenderá, estuvo dirigido a una ínfima cantidad de cubanos, dado que del millón de computadoras que hay en el país, solo medio millón están conectadas a internet.
En dicho panel participaron Orlando Hernández Guillén, presidente de la Cámara de Comercio, Ana Teresa Igarza, directora de la ZEDM, y Carmen María Orellana e Iván Ricardo Chacón, de los ministerios de Turismo y Transporte, respectivamente. Todos repitieron el guion previo acerca del embargo que Washington mantiene desde 53 años contra Cuba y las sanciones que afectan a las empresas estatales.
Todos los panelistas coincidieron en las limitaciones que imponen las leyes del embargo a las iniciativas anunciadas por los departamentos de Tesoro y Comercio, que según afirman, no tienen ningún efecto práctico y resultan inviables en estos momentos.
La postura asumida por los representantes del Gobierno afirma criterios que no son los de la mayoría de la población, y van en dirección contraria a lo expresado por la Secretaria de Comercio en el encuentro que sostuvo con la parte cubana el 7 de octubre cuando señaló: «Este cambio de política hacia Cuba se arraiga en el deseo de mejorar la vida de los pueblos de nuestros dos países. Queremos ayudar al pueblo cubano a conectarse con la economía mundial y a disfrutar de un mejor nivel vida y, a la vez, queremos darle al pueblo de Estados Unidos, la oportunidad de acercarse a Cuba y de entablar relaciones con su pueblo».
La Secretaria de Comercio dijo que EEUU no pretende que estos cambios tengan un efecto que trastorne la vida de los cubanos, que el efecto depende de que se tomen las medidas necesarias para cambiar la economía, de manera que acompañe el desarrollo del sector privado y aumente la prosperidad del pueblo.
Los medios oficiales no fueron autorizados a reflejar el encuentro de Pritzker y su delegación con Rodrigo Malmierca Díaz, ministro de Comercio Exterior y empresarios cubanos.
En las palabras de apertura de dicho encuentro, Malmierca expresó: «Nosotros sabemos que no va a ser un proceso fácil, pues hay muchas diferencias, pero apreciamos las medidas que Obama ha tomado para flexibilizar las relaciones comerciales». Y subrayó: «Consideramos que debemos seguir trabajando, incluso antes de que la propuesta de eliminar el bloqueo llegue al Congreso».
El Departamento Ideológico del Partido Comunista, ajustado a las órdenes recibidas, no autorizó a los medios oficiales a divulgar el encuentro de la Secretaria de Comercio con los únicos reporteros oficiales seleccionados: Sergio Gómez, del periódico Granma, Rosa Miriam Elizalde, directora de Cubadebate y Javier Ortiz, del Sistema Informativo de la Televisión Cubana. Los tres tenían la orden de hacer una sola pregunta.
Las tantas restricciones a las informaciones sobre la visita de la secretaria de Comercio resultaron, de tan ridículas, patéticas.
Pritzker, al destacar que ha habido avances notables en las relaciones entre los dos países, dijo: «Gracias a los cambios regulatorios hemos visto un aumento de los viajes de EEUU a Cuba, aumentamos la cantidad de remesas que se pueden enviar a Cuba, y autorizamos la venta de productos y servicios que pueden usar los empresarios cubanos, al mismo tiempo posibilitamos que las empresas de telecomunicaciones de EEUU pudieran participar en el mercado cubano para poder brindar apoyo a fin de lograr una mayor conectividad y acceso a la información para el pueblo cubano».
Como era de esperar, los planteamientos de la Secretario de Comercio en que informó de las medidas tomadas por Washington que van dirigidas a la mejoría de las condiciones de vida del pueblo cubano, y no en beneficio de la burocracia empresarial corrupta y parasitaria, no podían ser del conocimiento de la población.
Mientras los dirigentes del Gobierno y sus secuaces reclaman y patalean para que la Casa Blanca levante el embargo, mantienen el embargo interno impuesto a la fuerza al pueblo cubano, al que le conculcan sus derechos y libertades.
