La expedición del FC Barcelona aterrizó en Roma provocando una gran espectación en el aeropuerto, aunque la mayoría de los seguidores que esperaban a los blaugrana eran operarios del aeropuerto o miembros de la seguridad.
Todos ellos sacaron sus móviles para hacer fotografías a los jugadores del FC Barcelona y, sobre todo, a sus estrellas.
Precisamente, Leo Messi, la estrella del FC Barcelona, fue el jugador que más expectación provocó y a quien solicitaron los operarios más fotografías o autógrafos.
Se da la circunstancia de que dos de los policías que custodiaban la llegada del FC Barcelona en el aeropuerto y velaban por la seguridad del grupo a pie de pista no desaprovecharon la ocasión de estar cerca de Leo Messi y se hicieron un ‘selfie’ con el delantero argentino.
Una acción que provocó la inmediata recriminación y reprimenda de uno de sus superiores. Este les censuró que no estuvieran por su trabajo y que, en lugar de velar por la seguridad, estuvieran haciéndose fotografías con los jugadores.
La expedición del FC Barcelona fue recogida por un autocar a pie de pista que la trasladó directamente al hotel de concentración.
