Donald Trump sube y saca 11 puntos de ventaja a sus rivales

EFE /Nueva York

El magnate estadounidense Donald Trump saca 11 puntos de ventaja a sus rivales de cara a las primarias republicanas de las que saldrá el candidato de ese partido para las elecciones de 2016, según una nueva encuesta publicada ayer  en la prensa de EEUU.

Trump tiene el apoyo del 24% de los republicanos, 11 puntos por delante de su más directo rival, el exgobernador de Florida Jeb Bush, con un 13 % de las preferencias, de acuerdo con  el reciente sondeo de la cadena de televisión CNN.

El multimillonario subió   las últimas dos semanas 5 puntos porcentuales, mientras que Bush perdió  2, según la misma encuesta, que se realizó por teléfono entre el 13 y el 16 de agosto y tiene un margen de error de 4,5 puntos.

Donald Trump sería el mejor candidato para manejar la economía, según el 45% de los encuestados, y resolver el problema de la inmigración ilegal, según el 44%, pero un 58% responde que los republicanos tendrían más opciones de ganar las elecciones con otro candidato.

Con esta nueva encuesta de CNN, que se suma a otras publicadas en los últimos días en otros medios y en las que aparece liderando la contienda, el empresario parece inmune a la sucesión de polémicas que ha protagonizado desde que comenzó su campaña proselitista.

En tercer lugar aparece el neurocirujano Ben Carson, con un 9% de las preferencias, por delante del gobernador de Wisconsin, Scott Walker, y el senador de Florida Marco Rubio, ambos con un 8%, y el senador de Kentucky Rand Paul, con un 6 %, según el mismo sondeo de la cadena.

 

La lista de contendientes republicanos  continúa con el senador de Texas Ted Cruz, el gobernador de Ohio, John Kasich, y la empresaria Carly Fiorina, cada uno con un 5 % de las preferencias, y se cierra con el exgobernador de Arkansas Mike Huckabee, con un 4 %.

Por cierto,  el magnate  ocupó ayer  gran parte de su tiempo  en los tribunales esperando saber si era elegido para formar parte de un jurado en Nueva York, lo que lo obligó a aplazar su  campaña.  Trump llevaba años escapándose de cumplir con su obligación de ser jurado, una práctica habitual para muchos estadounidenses, aunque  no pudo escabullirse y le tocó su turno. «Es mi obligación y estoy feliz”, dijo.




Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

WordPress Lightbox Plugin
Ir a la barra de herramientas